Corren malos tiempos para la Educación. No voy a entrar en el juego de la administración que sostiene que no hay recortes, que existe el mismo numero de profesores, que las dotaciones económicas no se han reducido... Creo que por ahí seguimos perdiendo el tiempo o lo que se dice vulgarmente que "estamos mareando la perdiz".
Me remito a los hechos de centros concretos de educación primaria que a día de hoy han visto como para el curso que viene tienen un profesor menos y la reducción de otro profesor de primaria por el especialista de francés.
Para que lo entendamos todos, observa estos datos a modo de ejemplo:
- Centro bilingüe de 12 Unidades de primaria: (Necesita 12 tutores de primaria)
-Cómputo de horas lectivas (de clase) : 12 unidades x 25 horas semanales = 300horas
-Profesorado del que dispone el centro:
*7 profesores/as tutores/as de primaria
*4 profesores/as bilingues (tutores de curso)
* 1 especialista francés
* 2 especialistas de inglés
* 1 especialista de música
* 1 especialista E.Física
Si sumas el número de profesores y lo multiplicas por 25 horas lectivas semanales el resultado es de :
16 x 25 = 400 horas
Ciertamente "sobran 100 horas" solo necesitamos 300 y tenemos 400 horas.
¿Por qué preocuparse entonces?
De estas 100 horas "sobrantes" hay que descontar las destinadas a:
- Horario de dedicación del equipo directivo a la dirección : 27 horas
- Coordinación equipos de ciclo : 6 horas
- Coordinación planes estratégicos : 13 horas
- Coordinación biblioteca: 3 horas
- Cubrir horarios reduccion de 55 años 14 horas
TOTAL .... 63 horas
Parece que no sobran tantas horas ... 100 - 63 = 37 horas
Este centro dispone de 37 horas "libres" para sustituciones y apoyos
Dado el número de especialidades : Primaria, inglés, francés, música, E.Física, bilingüe. Es imposible "liberar" el horario completo de un profesor (25 horas) para sustituciones; es más, este número de especialidades elimina casi el concepto de profesor-tutor dado el número de profesores que entran en un aula ( al menos 6 si consideramos al profesor de religión).
También el concepto de refuerzos y apoyos pierde continuidad al no poderse concentrar los mismos en un determinado ciclo o nivel , dado el exiguo número de horas del que disponemos.
Por último, en caso de que un profesor esté enfermo , por ley no se le sustituye los primeros diez días, nos quedamos con solo 12 horas para refuerzos y apoyos o sustituciones.
¿ Y si hay dos bajas?
En este caso tendremos que repartir a los niños del segundo profesor que esté de baja, ya que no contamos con horas para cubrir las necesidades de dicho curso.
Por ejemplo: Si fuera un profesor de primero el enfermo , pasarían los 25 alumnos de este profesor al otro grupo de primero y a otros cursos ( Infantil de 5 años y segundo) quedando la ratio a unos 30 alumnos por grupo.
Ahora os pido que penséis que ese centro , en ese curso de primero con 25 alumnos , tiene a 6 alumnos de nuevo ingreso que desconocen nuestro idioma, a 5 alumnos desfavorecidos socialmente y que necesitan una atención especial y a 3 alumnos que deben ser tratados de alguna discapacidad . No cuento a los alumnos que necesitan apoyo educativo.
¿Lo imagináis? , ¿Se puede dar un mínimo de calidad educativa? Por eso el título de este post es claro: La Educación inclusiva es una necesidad.
Si a estos recortes (que no existen según la administración) se suman las pruebas y las reválidas de la nueva ley de educación (LOMCE) , es más que evidente que los alumnos de este centro van a tener muy , muy difícil , por no decir imposible, el llegar a bachillerato.
Se está haciendo una selección del alumnado y , a la vez, se están encasillando los centros en "buenos y malos", saliendo perjudicados gravemente los centros públicos.
Y , por supuesto, el profesorado en la misma medida y por las mismas razones, va a tener muy, muy difícil conseguir un mínimo de éxito escolar y , lo que mas duele, seguramente en este centro comience un deterioro del clima escolar ante el panorama desolador que se presenta.
Estoy convencido que la mayoría del profesorado va a responder (ya está respondiendo) con la máxima profesionalidad, pero va a ser muy duro sobrevivir cuando no se aprecia ni se considera el valor de la Educación.
Desde aquí hago un llamamiento a las familias para que no se crucen de brazos y apoyen al profesorado y exijan a la administración un derecho que le están quitando, el derecho a la Educación.
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