Es evidente la miopía de la clase política de este país en el ámbito educativo, donde la educación se mide en porcentajes ideológicos y en estrategias de ocultismo legislativo, sin tener en cuenta los más mínimos principios de crecimiento cultural con perspectiva de futuro.
Hoy, septiembre del 2012, nos encontramos de nuevo regresando a las cavernas, arrasando con la equidad, con la inclusión, con la ilusión de que podemos romper las barreras del clasismo que permanece agazapado tras los políticos neoliberales, personajes que solo entienden de estadísticas y resultados escolares obtenidos en una competencia desleal y desigual.
La LOMCE va a marcar un nuevo retroceso para las clases menos favorecidas, se va a producir la selección entre alumnos buenos y malos, así como la diferenciación de centros por su calidad...
Os invito a leer el análisis del profesor Fernando Trujillo LOMCE analizada o el del profesor Mariano Fernández Enguita ¿Adónde quiere devolvernos Wert? Y ante esto poco podemos hacer, ante el rodillo del partido que ostenta el poder. ¿No podemos?
Imagen de http://evitar.wordpress.com/
Me llama la atención que siempre se elaboren las leyes sin tener en cuenta a los artífices de su puesta en práctica: los docentes. Me imagino que el ordeno y mando es suficiente para que sigan funcionando en sus aulas o en las direcciones, aunque con un marco legislativo diferente.
Quien piense así, hasta ahora, ha tenido razón: pocos docentes se preocupan de una ley que les obliga a su desempeño, quizás este ha sido el error de leyes que no acabaron nunca de implantarse, profesores que continúan con sus rutinas y no han modificado nunca sus estrategias ni sus metodologías.
Pero hoy, a pesar de todo, hay novedades en el panorama: profesores implicados en proyectos integrados, redes sociales y profesionales de docentes que han avanzado en unos años lo que no se había conseguido en décadas, profesores universitarios descubriendo el valor de estar en el aula y participando desde la base, claustros que no se quedan callados y exigen seguir avanzando en calidad y en igualdad, equipos directivos vivos y colaboradores ... No, no es igual que antes, ahora sabemos lo que queremos y lo que necesitamos, ahora es el momento de seguir trabajando en el camino iniciado... Es el momento del profesorado.