Escribía Borges en su maravilloso cuento "La Biblioteca de Babel" , tan nombrado y querido por nuestro alumno Rubén Darío Ávalos :
"...Cuando se proclamó que la Biblioteca abarcaba todos los libros, la primera impresión fue de extravagante felicidad. Todos los hombres se sintieron señores de un tesoro intacto y secreto. No había problema personal o mundial cuya elocuente solución no existiera ... El universo estaba justificado, el universo bruscamente usurpó las dimensiones ilimitadas de la esperanza. "
Y el tesoro, la biblioteca, se encuentra en el corazón del barrio, de un barrio humilde, heterogéneo, multicultural, donde decenas de razas se entremezclan y comparten vidas y sueños. Pero no es una biblioteca al uso, no , ni mucho menos, es una biblioteca donde los libros crecen y se multiplican en las ventanas.
En un principio se colocaron algunos ejemplares en una repisa junto a la puerta de la asociación de vecinos , un puñado de títulos que desaparecieron rápidamente y , milagrosamente, fueron sustituidos por otros: Quién cogía uno prestado depositaba uno o más de su propia casa, de su colección de libros. En poco tiempo se multiplicaron y la repisa se quedó pequeña y así avanzamos hacía el alfeizar de la ventana contigua.
El sistema de préstamos , el universo de la lectura , usurpó bruscamente las dimensiones ilimitadas de la esperanza. Todos los hombres se sintieron señores de un tesoro intacto y secreto. Cuando se proclamó que la Biblioteca abarcaba todos los libros, la primera impresión fue de extravagante felicidad.
Porque la cultura es imaginación, es vida,es soñar ... es sentir un libro y compartir. Es tener cerca y respetar a quién silenciosamente convive a tu lado porque el altruismo es la esencia de la convivencia.
La Escuela rompe sus muros y sale a la calle: Educación.
Cultura y educación representan las dos caras de la misma moneda y las bibliotecas nuestro monedero. Bonita filosofía de trabajo ...
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