Es curioso observar todo el montaje burocrático que se organiza en torno a la escolarización: Anexos, comunicaciones, reuniones, comisiones de garantía, firmas digitales, registros de salida y de entrada...
Todo un entramado para enmarcar dentro de la legalidad los deseos (derechos) de las familias que quieren escolarizar a sus hijos e hijas en determinados centros. Tres meses encorsetados en normativa que la administración quiere cumplir a rajatabla, pero que la realidad la supera: matrículas extemporáneas, traslados, cambios de centro... Una movilidad constante que es lo habitual durante todo el curso y que , como no puede ser de otra manera, continúa en este periodo.
A todo ello se suman los desequilibrios de petición de centro, es decir, la desproporción de solicitudes entre centros de la misma zona. Las razones son conocidas por todos: Las familias siguen creyendo que los centros concertados son mejores que los públicos y si son de monjas o de curas mejor, y que algunos públicos tienen mejor nivel que otros por peregrinas y múltiples razones. Ante este desequilibrio la administración elimina unidades de los centros donde hay menos peticiones y las aumenta en aquellos que reciben más de las inicialmente ofertadas por lo que el desequilibrio se consolida y la injusticia también, al perjudicar a aquellos colegios que se ven con menos alumnado.
Llama la atención que centros distantes uno de otro apenas 1000 metros , de la misma zona, uno público y el otro concertado, en el público reciban a más de 20 alumnos de un asentamiento de chabolas cercano y una alta tasa de alumnado inmigrante y en el concertado a ninguno... !!Ay, la magia de la escolarización!!
En un reciente artículo de Héctor Cebolla Boado (@hcebolla) , "Desmontando mitos sobre escuelas públicas e inmigración" , evidencia la equivocación que se tiene en cuanto a la elección de centros por criterios puramente subjetivos y en absoluto atendiendo a razones pedagógicas y de calidad. Destacan estas tres premisas:
*"Los debates sobre educación en España están lastrados por la dificultad de encontrar diagnósticos representativos y por la multitud de mitos alrededor de cómo funcionan los centros escolares".
*"Si tenemos en cuenta el desequilibrio en la distribución de los alumnos según su clase social, los centros públicos no obtienen peores resultados que los privados y concertados."
*"Del mismo modo, la concentración de inmigrantes en un centro escolar no tiene impacto en los resultados una vez descontadas las desigualdades de clase."
..."No se puede por tanto decir que la concentración de inmigrantes perjudique el rendimiento general. El perjuicio viene más bien de la concentración de alumnado en desventaja socioeconómica y esto es común a los colegios con más y con menos inmigrantes. No es la inmigración, es la desigualdad en la distribución de la renta (y otros recursos de los hogares).
Los efectos de escuela en España, es decir cuánto peso tienen los centros en los resultados que obtienen los niños, apenas están en torno al 20% (dependiendo de los datos que utilicemos). Y la mayor parte de este 20% se explica por las diferencias socioeconómicas de los alumnos. Más que mejores y peores escuelas, hay centros a los que asisten niños con importantes ventajas de partida y otros en los que se escolarizan alumnos con más carencias relacionadas con los recursos de sus padres. Es cierto que las escuelas públicas y las que acogen a más inmigrantes tienen rendimientos medios más bajos. Pero no porque las primeras sean peores o porque en las segundas la presencia de inmigrantes perjudique el rendimiento. Es así porque en estos tipos de escuelas se concentran alumnos que proceden de hogares menos favorecidos."
Ante esto , si el alumnado que puede tener mayor nivel adquisitivo y no está en desventaja social se va a otros centros y no al que le corresponde por cercanía, es evidente que va a perjudicar al centro que abandona y va a favorecer al centro de acogida, el cual va a tener la posibilidad de "elegir" alumnado ante el superavit de la demanda. Este círculo perpetua el estigma de centros con sellos "El colegio de los gitanos" , "El colegio de los extranjeros" y favorece a los centros donde llega el alumnado con mayor poder adquisitivo y nivel sociocultural. Este proceso , como mencionamos anteriormente, se consolida en tanto la administración favorece la creación de unidades en los centros con más demanda y cierra unidades en los que tienen menos solicitudes, un círculo ciertamente diabólico.
Por fortuna existen centros que son capaces de reinventarse a pesar de todo y crecen y se mantienen ante la adversidad, son excepciones, pero confirman que los centros públicos que trabajan en situaciones adversas tienen capacidad para obtener éxito escolar.
Son centros normalmente mejor equipados, con plantillas preparadas para un trabajo complejo y , por tanto, capacitadas para ofrecer a los alumnos una educación de calidad desde la inclusión y la diversidad. La garantía de este éxito se constata cuando año tras año se le llenan las aulas con alumnos y alumnas que no han entrado durante el proceso de escolarización , por no existir plazas, en los centros de "élite" y ya permanecen en sus aulas durante toda la Etapa de Infantil y de Primaria.
Es el caso del CEIP San José Obrero de Sevilla, que comienza la escolarización con una oferta de una sola unidad de 3 años (25 plazas) porque le han reducido una y que al final del proceso suele aumentarse a dos unidades (50 plazas), ante las peticiones de alumnos que no han accedido al colegio de las monjas o al colegio público de élite.
Evidentemente nos gustaría que estas familias hubieran pedido nuestro centro en primera opción, pero bueno, poquito a poco se impondrá la cordura, espero, si no : Ellos se lo pierden.
Como bien dices, el número de alumnado desfavorecido en un centro no tiene nada que ver con los resultados individuales de los alumnos con un nivel socioeconómico medio-alto. Al final en el colegio están cinco horas al día, las experiencias que reciben el resto del tiempo son tan importantes o más que las que reciben en clase. La familia es importantísima para el buen desarrollo del niño/a, y parece que eso se nos olvida al elegir colegio.
ResponderEliminarUn placer haberte encontrado. Te seguiré visitando.